
Sea lo que sea que estemos haciendo, trabajando, estudiando, cuidando del hogar, o una combinación de actividades, la realidad es que cada rol que ejercemos conlleva responsabilidades; y esas responsabilidades se nos pueden salir de las manos, creando un caos mental y emocional.
Podemos decir que las obligaciones pueden vaciar el tanque de fuerzas de nuestra alma y cuando esto ocurre es muy difícil de parar puesto que lleva al agotamiento.
Quiero que guardes en tu corazón lo que en la Biblia se establece en el Salmo 62:5, el cual puede ser una receta para nuestra alma agotada, que dice: “Solo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi esperanza”. (NVI)
En el texto hebreo original, la palabra “descanso” significa “llegar a un estado de silencio o quietud”.
Nuestra alma a veces entra en un estado de inquietud y necesita ser calmada.
Así que el Salmo 62:5 nos presenta el remedio para nuestra alma agotada: “Descansar solo en Dios”.
Así pues, cuando te sientas sin aliento debido a las tareas agotadoras de tus roles, tienes un remedio garantizado; que no es una siesta, ni el parar temporalmente de las responsabilidades —aunque eso puede ser una parte de la solución.
Pero el remedio definitivo está en el Señor, Él es el único que puede tranquilizar y satisfacer nuestras almas.
¿Cómo lo hace? Cuando leemos, estudiamos o memorizamos Su Palabra, cuando decidimos aplicarla en nuestro diario vivir.
Ocurre también cuando nos comunicamos con Él a través de la oración. Y no es a través de una oración con una lista de peticiones, sino más bien cuando derramamos nuestros corazones ante Él durante un tiempo profundo de intimidad y enfoque puesto en Él.
Es así como podemos encontrar el verdadero reposo para nuestras almas; es un descanso sagrado que solo Dios puede proveer.
No te confundas, las cosas de este mundo solo dan solución temporal, Dios las da eternas.
Oremos: “Amado Padre Celestial, reconozco que a veces mis roles y responsabilidades amenazan con angustiar a mi alma, por eso acudo a Ti, pidiendo ayuda para encontrar mi verdadero reposo, creo que este solo puede venir de Ti, lo creo y declaro en el Nombre de Jesús, Amén”.
Versículo: “Solo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi esperanza”. Salmo 62:5 (NVI)
Buen Día
Juan C Quintero
Buendiatodoslosdias.com
