ORANDO EN EL ESPÍRITU
Pastor, Jorge L. Cintrón
“Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.”
1 Juan 5.14–15
Se ha señalado que Jeremías 33:3, “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces” es el equivalente para el creyente del número telefónico 911 para emergencia.
A través de La Biblia se exhorta al creyente a ejercitarse en la oración.
Alguien escribió lo siguiente sobre la oración viéndola como el teléfono que el creyente tiene para comunicarse con Dios.
Imagínate qué sucedería si Cristo decidiera instalar una contestadora telefónica automática en el cielo?
Imagínate orando y escuchando el siguiente mensaje:
Gracias por llamar a la Casa de mi Padre…
Por favor selecciona una de las siguientes opciones:
Presiona 1 para peticiones.
Presiona 2 para acciones de gracias.
Presiona 3 para quejas.
Presiona 4 para cualquier otro asunto.
Imagínate que Dios usara la excusa tan conocida…“de momento todos nuestros ángeles están ocupados, atendiendo a otros clientes. Por favor manténgase orando en la línea y su llamada será atendida en el orden que fue recibida…
Te imaginas obteniendo este tipo de respuestas cuando llames a Dios en tu oracion?…
Nuestra computadora señala que ya llamó otra vez hoy, por favor cuelgue inmediatamente … o bien lo siguiente: Nuestras oficinas están cerradas el fin de semana, por favor vuelve a llamar el lunes.
GRACIAS A DIOS que esto no sucede… GRACIAS A DIOS que le puedes llamar en oración cuantas veces necesites.
La Biblia presenta varios ejemplos de oraciones contestadas.
1- Moisés clamó a Dios, y el mar es dividido
2- Josué oró, y Acán fue descubierto
3- Ana oró, y nació Samuel;
4- Daniel oró, y le fueron reveladas las setenta semanas
5- Mardoqueo le pidió a Ester que ayunará y orará, y Amán murió en la horca que él mismo había mandado levantar para Mardoqueo
6- Nehemías oró, y el corazón del rey se ablandó en un minuto
7- Elías oró, y la lluvia descendió a la tierra
8- Eliseo oró, y el Jordán es dividido
9- Eliseo oró, y un niño resucitó
10- La iglesia oró ardientemente, y Pedro fue libertado por un ángel
11- Pablo y Silas oraron y cantaron, y las puertas de la prisión les fueron abiertas y cayeron las cadenas de todos los presos.
A través de La Biblia podemos encontrar pasajes bíblicos que se pueden utilizar como números telefónicos que podemos marcar. Teléfono de emergencia del cristiano la oración.
Ø Cuando te encuentres en una grave situación utiliza el 911, Jeremías 33:3,….. Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.
Ø Cuando te sientas Triste marca….. Juan 14:1, No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
Ø Cuando estés Nervioso marca….. Salmo 61:1–3, Oye, oh Dios, mi clamor; a mi oración atiende. Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare. Llévame a la roca que es más alta que yo, porque tú has sido mi refugio, y torre fuerte delante del enemigo.
Ø Cuando estés Preocupado marca….. Mateo 6:25, Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
Ø Cuando estés en Peligro marca….. Salmo 91:1–4, El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios, en quien confiaré. Él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro.
Ø Cuando sientas Temor y estés en Soledad marca….. Salmo 23:1–3, Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma. Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Ø Cuando necesites Paz y Descanso marca….. Juan 14:27, La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
Ø Cuando Dios parece estar Distante marca….. Salmo 63:1,2 Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te he mirado en el santuario.
Ø Cuando hayas caído en Pecado marca….. Salmo 51:1–3, Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis rebeliones.
Ø Cuando te sientas Deprimido marca….. Salmo 27:1, Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
Ø Cuando necesitado de actuar en Fe marca….. Hebreos 11:1, Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
Ø Cuando necesites Valor marca….. Josué 1:9, Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
Ø Cuando no te sientas Amado marca….. Jeremía 31:3, Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.
A través de las enseñanzas de Jesús los cristianos son exhortados a orar
“Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.” (Marcos 11:24)
“Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.” (Juan 15:7 3)
“En aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará. Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.” (Juan 16:23,24)
Jesús, según el evangelista Juan, hace una afirmación extraordinaria: “De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré” (Juan 14:12-14).
Jesús utilizó dos parábolas para enseñar la necesidad de ser perseverante al orar:
El amigo a media noche (Lucas 11:5-10)
A medianoche, uno de ustedes va a la casa de un amigo
-“Vecino, préstame por favor tres panes. Un amigo mío, que está de viaje, ha llegado y va a quedarse en mi casa; ¡no tengo nada para darle de comer!”
-“¡No me molestes! La puerta ya está cerrada con llave, y mi familia y yo estamos acostados. No puedo levantarme a darte los panes”- le responde el vecino
Si el otro sigue insistiendo, de seguro el vecino le daría lo que necesita, no tanto porque aquél es su amigo, sino para no ser avergonzado ante el pueblo.
El juez injusto (Lucas 18:1-8)
En una ciudad había un juez malo que no tenía miedo ni de Dios ni de la gente. Allí también vivía una viuda, que siempre lo buscaba y le decía:
-“Por favor, haga usted todo lo posible para que se me haga justicia en la corte.”
Al principio, el juez no quería atender a la viuda. Pero luego pensó:
-“Esta viuda molesta mucho. Aunque no le tengo miedo a Dios, ni me importa la gente, la voy a ayudar. Si no lo hago, nunca dejará de molestarme.”
Jesús al presentarle el Padre Nuestro a sus discípulos, según Mateo, corrige unas prácticas inadecuadas al orar.
Hipocresía–exhibicionismo
“Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.” (Mateo 6:5)
Palabrería
“Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.” (Mateo 6:7)
La necesidad de perdonar.
“Si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.” (Mateo 6:14,15)
Es interesante señalar lo que presenta 1 Pedro 3:7 sobre la oración
“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.”
La oración es muy importante para la vida del creyente.
Muchas personas dicen que Dios siempre contesta la oración, yo también lo creo, pero a renglón seguido dicen: “Dios contesta con un “Sí”, con un “Espera” o con un “No”. La realidad es que a todos nos gustaría que la contestación de Dios fuese siempre un “Sí”. No creo que a alguien le guste orar para recibir de parte de Dios una contestación de “Espera” o con un “No”. A todos nos gusta que Dios nos conteste nuestras oraciones con un “Sí”.
Hace muchos años atrás mi vida espiritual fue impactada cuando leí esta porción de 1 Juan. 5:14,15 “Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.”
Hay un tipo de oración que siempre es contestada con un Sí. La oración hecha en la voluntad de Dios.
¿Podríamos orar en la voluntad de Dios?; claro que si
Aceptando una gran bendición que Dios le ha dado al creyente.
Pablo le escribió a los corintios: “Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.” 1 Corintios 2:16
Aprendiendo como Cristo a someternos a la voluntad de Dios.
Jesús oró en Getsemaní: “Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú.” (Mateo 26:39)
Permitiendo que el Espíritu Santo controle nuestras oraciones.
“Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.” (Romanos 8:26-27)
El creyente en Cristo Jesús que descubre lo que es orar en el espíritu vivirá una vida de victoria continua.