Huye de las malas pasiones de la juventud!
“Huye de las malas pasiones de la juventud, y esmérate en seguir la justicia, la fe, el amor y la paz, junto con los que invocan al Señor con un corazón limpio”. 2 Timoteo 2:22
Dios nos da diferentes etapas en nuestras vidas para que en cada una de ellas la disfrutemos agradando al Señor en todo; estas etapas son importantes porque nos hacen disfrutar y gozar de lo que Él nos brinda.La inocencia de la niñez y la belleza de la adolescencia, cada una de ellas marcan nuestras vidas y lo que hagamos determinará lo que seremos en Cristo.
La niñez está supervisada por los padres, los cuales tienen la obligación que cuidar a sus hijos para que nada les pase; la adolescencia es más difícil, porque en esta etapa quieren ser independientes y ya no se llevan en todo de lo que sus padres le dicen.
Como padres, no apartemos nuestros ojos de ellos y permanezcamos exhortándolos a que se cuiden y no se dejen influenciar por amigos o por los bombardeos que a diario reciben para que pierdan su galardón delante de Dios, y para que mantengan su corazón limpio buscando la justicia, la fe, el amor y la paz, las cuales son columnas inquebrantables ante los desafíos de la juventud.