El Señor nos ha dado a cada uno dones únicos.
No necesitamos equipo prestado. Podemos
aprender de David, removiendo cualquier cosa
que nos estorbe y nos ayude avanzar para
ver la gloria de Dios en nuestras vidas.
Y Saúl vistió a David con sus ropas, y puso sobre su
cabeza un casco de bronce, y le armo de coraza.
Y ciño David su espada sobre sus vestidos, y probo a andar,
porque nunca había hecho la prueba. Y dijo David a Saúl:
Yo no puedo andar con esto, porque nunca
lo practiqué. Y David echo de si aquellas cosas.
1 Samuel 17:38-39