Servirle a Dios es algo más que ir varios días a la semana
a la iglesia. Es dejarnos moldear por Él, imitarlo, morir al
YO para dejarnos discipular por Él. Hay un corito viejo que dice:
“si dices que permaneces en Él debes andar como Él anduvo”.
Caminemos como Jesús, amemos como Jesús,
perdonando a los demás como Jesús lo hizo.
Y Él nos dará la victoria. Amén.
Mas la hora viene, y ahora es, cuando los
verdaderos adoradores adorarán al Padre en Espíritu
y en verdad; porque el Padre tales adoradores
busca que le adoren.
Juan 4:23