Una de las grandezas de Nuestro Señor es que
siempre esta dispuestos a darnos nuevas
oportunidades. El rumiar el pasado paraliza
el presente y deja en bancarrota el futuro.
¡Lo que paso ya paso!.
Y perdona nuestras ofensas así como también
nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
Mateo 6:11