Cuando la tentación llame por teléfono,
no discutas con ella, cuelga
inmediatamente.
Pero no huyamos del Señor.
Él es nuestro Todo. Y esta siempre
dispuesto a escucharnos.
Los ojos de Jehová están sobre los justos
y atentos sus oídos al clamor de ellos.
Salmos 34:15