Hay algo que nunca debemos decir delante de Dios:
“No quiero. Yo no puedo”. Cuando el Señor habla, y nos
quiere encargar un trabajo, siempre debemos responder:
“Si, Señor. Haré como me mandas. Cuando tu
mandas respalda, eres Omnipotente” y me dará la
sabiduría para hacerlo.
Dios tiene un plan para ti;
Tú tienes talentos que Dios quiere usar.
Después oí la voz del Señor, que decía:
¿A quién enviaré y quién irá por nosotros?
Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí.
Isaías 6:8