En ningún momento de mi vida me siento
sol@, porque Dios me guía y me protege.
Mi amado Señor gracias por tu gran amor
y misericordia, porque siempre estas a
mi lado no importando cuanto te haya fallado,
tú me perdonas y me sigue amando.
Te amo JESUS. Aleluya!!!
Lo rodeó, lo instruyó, lo guardó como
la niña de su ojo.
Deuteronomio 32:10b