Ejemplos de la Abnegación Cristiana
Pablo salió de Atenas y fue a Corinto.
Y halló a un judío llamado Aquila…
con Priscila su mujer… Fue a ellos.
Hechos 18:1-2.
Saludad a Priscila y a Aquila,
mis colaboradores en Cristo Jesús,
que expusieron su vida por mí…
Saludad también a la iglesia de su casa.
Romanos 16:3-5.
Priscila y Aquila son nombrados seis veces en la Palabra de Dios. Cristianos de origen judío, fueron expulsados de Roma a causa de su raza (Hechos 18:2). Entraron en contacto con el apóstol Pablo por medio de su oficio, puesto que los tres fabricaban tiendas. Después de haber soportado las burlas de la alta sociedad ateniense, ¡Cuán alentador fue para el apóstol estar en compañía de gente sencilla que comprendiera el valor del mensaje divino!
Esa pareja cristiana no se limitaba a trabajar para su subsistencia diaria, sino que ambos estuvieron dispuestos a ir de Corinto a Efeso para servir al Señor. Allí completaron con tacto la instrucción de un siervo de Dios, Apolos, explicándole más detalladamente el alcance de la obra de la cruz (Hechos 18:18-19, 26).
Esa pareja también había mostrado valentía y afecto por el apóstol Pablo, en una época en que ser cristiano podía conducir a la cárcel o al martirio (Romanos 16:3). En esas peligrosas circunstancias volvemos a encontrarlos juntos. Así, Aquila y Priscila servían al Señor y a Su Iglesia. En Efeso (1 Corintios 16:19), y más tarde en Roma, pusieron su casa a disposición para reuniones de adoración y oración. A tales creyentes les “será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Pedro 1:11).