Amar y Actuar

En el libro de San Marcos 12:30 de podemos encontrar uno de los más grandes y primero de los mandamientos, que Dios nos ha dado y es el Amar a tu Dios con todo tu corazón, con toda tu mente, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.

Amarlo con todo tu corazón significa entregarte por completo a El darle todo tu ser, toda tu vida, que él sea tu centro que en todas tus decisiones que tomes, amarlo es tenerle en cuenta a Él, que sea tu guía , tu respirar, tu universo, tu aire, tu todo.

Con toda tu mente, visualízate junto con él en ese Reino que nos muestra en su santa palabra: Apocalipsis 21: 22, soñemos y visualicemos con toda la mente aquel encuentro e imaginemos verle y encontrarnos cara a cara con El.

Con toda tu alma Es entregarlo todo, romper con las cadenas con todos los yugos, las inseguridades, temores angustias, preocupaciones, distracciones, es entregarte en cuerpo y alma a tu señor a Sabiendas que el romperá todos tus yugos y te librara y te sostendrá con su diestra.

Con todas tus fuerzas, es que a pesar de las dificultades, las separaciones que pueda
haber en tu familia por ser tu Cristiano y ellos no, es a pesar de las persecuciones, burlas, palizas, desengaños, traiciones, a pesar de todo esto amarle con todas tus fuerzas, al final cuando lleguemos allá arriba a la nueva Jerusalén ya no habrá más llanto, más dolor, más lamento (Apocalipsis 21:4)

Es por esto, que Amar y Actuar es recordar en todo tiempo el sacrificio que hizo Jesús en aquella cruz por la Salvación tuya y mía, cuando actuamos mal dejamos de aplicar este mandamiento, cuando le hablamos mal al prójimo dejamos de aplicar este mandamiento, cuando criticamos al hermano, cuando juzgamos dejamos de amar a Dios con todo el corazón , Amar va mas allá, es llevar una vida de rectitud, de integridad, de santidad plena, una vida agradable a Dios, de manera que podamos serle fiel en todas esas facetas y cumplir verdaderamente este primer mandamiento impuesto por Dios, lo demás vendrá solo.

Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.
Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos.  Marcos 12:30-31

Enviado por: Soraya Soriano