Dar es un acto de un corazón que es generoso, dar es una muestra de amor y de desprendimiento, pero lamentablemente cada vez menos se enseña en la cultura moderna sobre la generosidad.
En esta sociedad poco se habla de dar; más bien nuestra cultura te dice constantemente que acumules y consigas más, es decir, que estamos viviendo en un mundo de “todo es sobre el yo”; lo que yo tengo, mis cosas, mis necesidades, es decir, vidas centradas en el “yo”.
Cuando lees en la Biblia sobre Jesús te das cuenta de que la máxima expresión de Dios el Padre fue el darlo todo por nosotros
En la carta a los Filipenses, capitulo 2, versos 4 al 5, dice “No se ocupen solo de sus propios intereses, sino también procuren interesarse en los demás. Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús” (NTV)
Así pues, cada vez que eres generoso(a) fortaleces tu fe y te vuelves más como Jesús.
Al dar se produce un cambio en tu corazón, te parecerás más a Jesús, quien dio su vida por nosotros.
Comienza siendo generoso(a) en tu casa, con tu familia, invierte tiempo en tu cónyuge para que le demuestres con hechos el amor que profesas; con tus hijos busca impactarlos con actos de amor, sal con ellos, invítalos a caminar contigo, dales tiempo de calidad.
Así sabrás que no puedes amar sin dar.
En el mundo hay mucha necesidad, así que cuando inviertes tiempo, talento y recursos en los demás, estas siendo generoso(a), lo que también fortalecerá tu fe.
Debes saber que Dios es fuente inagotable de bendiciones, por lo tanto, si le provees a los demás de lo que necesitan, estas activando la fuente celestial para que la provisión ilimitada de Dios se manifieste en tu vida.
El Señor en Su amor proveerá para todas tus necesidades si tu corazón es generoso para con los demás. Inténtalo, hazlo como una imposición personal y verás como tu ser comenzará a parecerse más a Jesús
Oremos “Amado Señor, hoy reconozco que he tenido una actitud egoísta y centrada en mis intereses. Quiero a partir de hoy activar la generosidad, ser una persona que ama a los demás para compartirles lo que Tu me das, sin medida, ni reserva, sabiendo que Tu me proveerás mas allá de lo que me pueda imaginar, lo creo y declaro en el Nombre de Jesús, Amén”
Versículo “No se ocupen solo de sus propios intereses, sino también procuren interesarse en los demás. Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús” Filipenses 2:4-5 (NTV)
Buen Dia
Juan C Quintero
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