En cada persona hay áreas con las que tiene grandes luchas y debilidades a superar para encontrarse un paso más cerca de Dios.
Te pregunto ¿estás todavía luchando con pecados pasados? ¿centras tu mirada en ver las cosas negativas de tu vida?; ¿tienes la creencia de que cargas con un problema de herencia familiar?; o por otro lado te pregunto, ¿aún posees mal genio?; ¿tienes un problema de ira, de lujuria, de falta de perdón?; ¿estás teniendo pensamientos de muerte o de suicidio?, o ¿tienes luchas con las tentaciones con el alcohol o las drogas?
La lista la puedo extender, pero el punto clave aquí no es la lista, sino las acciones nuestras y la respuesta de Dios.
Por experiencia sabemos que no es fácil liberarse de aquello que atormenta o que es un pecado repetitivo.
La Palabra de Dios en la carta a los Hebreos capítulo doce verso uno dice “… liberémonos (soltemos, tiremos, apartémonos) de todo peso (estorbo) y del pecado que nos asedia”
Me imagino, en el mundo natural esta situación de “estorbo” como el equivalente a tener un cordón desatado que al empezar a caminar nos impide avanzar y nos hace caer.
El Señor quiere que “cambiemos el enfoque”; es decir, que voluntariamente dejemos de centrarnos en lo que nos impide avanzar, que le quitemos la importancia, y que nos dediquemos a ir adelante, para que podamos correr la carrera que Él ha determinado para nosotros.
¡Todos estamos llamados a hacer grandes cosas para Cristo!; esto es, cumplir el llamado y además a ganar almas para Cristo y derribar así todo lo que el enemigo quiera construir en nuestras vidas y en las de los demás; sabiendo que “Dios nunca ha perdido una batalla y que nunca la perderá”.
Únete a personas de fe, que te animen a seguir adelante en la carrera de la victoria que tenemos en Cristo, ¡no te rindas!
Declara lo que está escrito en Jeremías capítulo veinte, versos once al trece que dice “Más Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada”. (RVR1960)
¡Quita tu mirada de lo que te estorba y colócala en Jesús!
Versículo “Más Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada”. Jeremías 20:11-13 (RVR1960)
Buen Dia
Juan C Quintero
BuenDiaTodosLosDias.com